Un argentino en Biskaia

Quien escribe debajo es Federico Voltan (@Fedevoltan), un argentino que se fue a España a estudiar Ingeniería Industrial y comparte la locura por Bielsa.

Hace dos meses que vivo en Bilbao, en la provincia de Biskaia en el país vasco. Para que conozcan un poco más estas tierras,  es importante saber quiénes son los vascos y quiénes son los españoles. El país vasco o Euskadi como se lo conoce,  tiene 2 millones de habitantes aproximadamente y ellos sienten un insulto cuando se los llaman españoles o se los nombre como parte de España, ellos son vascos y nada más. El terreno se divide en 3 provincias, Alaba, donde juega el Alavés ahora devenido a la segunda B, Guipúzcoa, tierra del Real Sociedad y por ultimo Biskaia donde juega el Athletic.

Para un argentino resulta muy extraño moverse por estos pagos y ver que solo se siente una camiseta. Estamos acostumbrados en Buenos Aires a tener clubes por barrios o tener 3 vecinos que viven pegados y sin embargo simpatizan por 3 clubes distintos, basta con irse hasta Rosario para ver cómo una ciudad se divide en  solo dos pasiones y llama la atención.  Aquí las cosas son distintas. Si vives en Biskaia eres del Athletic y no existe otro club, lo mismo en Guipúzcoa con la Real. Caminando por las calles, yendo a cualquier bar, a una universidad, tomando el metro, siempre dentro de la provincia solo se verá la bandera roji blanca colgada en los balcones o en los techos de los autos tatuada, en una ciudad que respira y vive el futbol con mucha pasión. 

Toda esta introducción es importante para saber porqué Bielsa se transformó en un fenómeno de verdad. En todos lados se habla de él, basta pasar por un bar y ver que en la pantalla esta su cara, basta escuchar alguna charla de café con Marcelo como centro de discusión, basta con tomar un taxi y tener una conversación sobre él. Recuerdo cuando se filtró el audio y fue noticia aquí. Estaba en la sala de computadores de la facultad y entraron 2 vascos  hablando del tema. Los comentarios eran “es el puto amo”, “este Bielsa es la leche” y llovían elogios de jóvenes que admiraban a Marcelo por esas palabras que nunca tendrían que haberse filtrado, pero sin quererlo engrandecieron aun más la figura del loco.

Federico Voltan